Saturday, May 19, 2012

La Era de los centros de entrenamiento - Jose Musse

Parecería que entramos a la Era de los centro de entrenamiento. Argentina anuncia un mega proyecto de 10 hectáreas. 14 veces mas grande que la Academia Nacional de Bomberos de Chile. Se proyecta habitaciones para más de 100 personas y un auditorio para 200. México tiene planes de un centro similar aunque se conoce poco los detalles. En Perú, una empresa privada, el Grupo 3S ha creado el IFTE (Instituto de Formación Técnica y Entrenamiento). Luego de décadas de predominio chileno surgen nuevos operadores. No es que no hayan habido otros centros de formación en America Latina, solo que ninguno se levantó con un perfil más alto que el. La Escuela Interamericana de Bomberos de Cali, que tan bien promueve el Capitán Jairo Soto Gil, es el ejemplo de una escuela cuyo perfil e imagen esta elevándose en el continente y se convierte en un elemento valioso en la cadena de valor. Hay una importante demanda interna e internacional. La mayoría quisiera ir a la Escuela de Bomberos de Texas A&M, pero tanto por costos, visados e idioma no es fácil. Aunque no se quiera habrán comparaciones, aunque estas sean odiosas como dijo sobre otro tema, el Jefe de Bomberos Fernando Bermejo de Badajoz, ahora retirado. ¿Quién relucirá? Los argentinos apuestan por un modelo de clase mundial, cumplirán la NFPA 1402 Guide to Building Fire Service Training Centers y será Kidde quien desarrollará lo esencial del proyecto. Los chilenos cumplen esta norma NFPA y han logrado un total de tres certificaciones reconocidas internacionalmente. Antigüedad es clase y veremos si se impone. La iniciativa peruana es más pequeña, pero no debería subestimarse. Al ser privado, no requiere aprobaciones de pesados directorios, ni de fundaciones o juntas. Solo la decisión de su gerencia general. Claro, que al ser particular no cuenta con un abultado presupuesto. Tamaño no es sinónimo de mejor ni eficiencia. La reputación se gana en el campo. No serán ostentosas edificaciones ni fastuosos simuladores los que garanticen la mejor enseñanza, de la misma manera que el mejor camión de bomberos no es sinónimo de mejores bomberos. En mi experiencia personal, la de casi 18 años diseñando, dirigiendo y creando cursos orientados a la educación de bomberos de casi todos los países de habla hispana, creo que los centros de formación de bomberos se parecen mucho a los parques de diversiones. Me explico. Los parques de diversiones tienen juegos, los centros de formación los simuladores. El simulador móvil ARFF que usa el Estado de Virginia costó cerca de un millón de dólares. Un simulador similar puede ser reproducido para apagar las mismas funciones de fuego a gas por un monto de 30 mil dólares, con tecnología hecha en casa. Sin la gran marca, pero igual de seguro e instructivo. Un centro de formación debe tener exclusivos simuladores, originales, versátiles y atractivos. Los simuladores como los juegos de los parques de diversiones deben ser renovados constantemente, es la mejor forma de seguir atrayendo. Los estudios Universal anunciaron en diciembre que cerrarían el parque temático de "Tiburón", se especula que se instalará en ese lugar el modulo "Transformers" De ahí el problema de invertir en simuladores costosos, pues deben ser reciclables para mantener el interés. Porque un centro de entrenamiento no forma equipos de primera respuesta en forma lineal o como producción en serie. La enseñanza se recicla. Hay certificaciones, recertificaciones y la aparición de nuevos cursos, ejercicios, etc. Los grandes parques de atracciones tienen programas de entretenimiento. Los centros de formación tienen cursos llamado estacas. Es decir, programas que se repiten constantemente y cuentan con un garantizado flujo de estudiante. Por ejemplo, curso de bomberos, curso de conductor de vehículos de emergencia, curso oficiales de bomberos, paramédico, materiales peligrosos, etc. Luego están los cursos de moda. Hoy, todos están interesados en Flashover, Rapid Intervention Team y BREC. Los parques de diversiones tienen espectáculos especiales. Realizan conciertos, exhibiciones de animales y plantas exóticas, invitan acróbatas, etc. Los centros de formación deben albergar congresos anuales. Invitar instructores que destacan por hacer propuestas e innovar tecnologías. Jefes de bomberos que han estado en destacados incidentes, como el 11S, 11M, etc. Ojo, he dicho que los centros de formación de bomberos se parecen a los parques de diversiones, no que sean idénticos. Son los contrastes lo que define la diferencia. Después de todo, como ya dije, que un servicio de bomberos tenga el mejor camión escalera, mejores cascos, guantes, ropa y botas no garantiza que el bombero sea un excelente apaga fuegos. Ese es lo que me hace pensar que los centros de formación que están en manos de autoridades públicas o directorio de bomberos no garantizan la mejor enseñanza. Por ejemplo, en el proyecto argentino se anuncia cursos gratuitos. En mi opinión, todo tiene un costo y un centro debe ser rentable, al generar sus propios ingresos se pueden realizar inversiones directas. Muchas veces se debe pasar por una larga burocracia que aletarga la calidad e innovación. Frecuentemente, la gente en muchos casos no aprecia lo que es gratis. Cuando algo cuesta, se entiende que debe ser atractivo, competitivo y de calidad. Lo que el centro peruano da por entendido. Eso obliga que los programas deban ser novedosos y renovados. Si cree que no tengo la razón, solo vea lo mucho que han tomado los argentinos para hacer este proyecto y lo más que se demoran los otros países, para avanzar en esta dirección. Hay algo más que me hace pensar mal de los centro de formación de bomberos que no son privados sino que están atados a la misma organización de bomberos. ¿Quién dirigirá el centro de entrenamiento? ¿Quiénes serán sus instructores? La historia demuestra que los puestos se reservan a los mismos bomberos de la organización propietaria. Esto es una endogamia que evita nutrirse del universo. En el caso de Texas A&M y en la construcción de su éxito está la pluralidad y libertad de escoger instructores y directores de todo el espectro de nacionalidades y orígenes. ¿Podría la ANB nombrar a un director boliviano, venezolano o argentino? Me temo que hay organizaciones muy conservadoras para jugadas tan arriesgadas. En esa misma tónica. ¿Podrían los bomberos argentinos nombrar de director a un ex director chileno de la ANB? Después de todo, ¿Cuántos bomberos argentinos tienen la experiencia de manejar un centro de formación tan prestigiado en América Latina? Por favor, no quiero insinuar que no hayan argentinos calificados, solo pretendo señalar lo cerrado que suelen ser estas estructuras. Aunque con el nacimiento de la Organización de Bomberos Americanos (OBA) algunas cosas pueden cambiar. Bomberos de Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, Chile, Paraguay, Uruguay y Venezuela se han organizado para coordinar y estandarizar trabajos. A lo que voy, es que me gustaría ver a estos centros de formación con un nutrido staff de instructores internacionales. Siguiendo con las cosas en las que no nos parecemos entre un centro de entrenamiento y un parque de diversiones es la alta calificación del Staff de los centros de entrenamientos de bomberos. Algunas universidades norteamericanas exigen a sus profesores, un libro y hasta dos publicaciones en las revistas de su especialidad al año. Debe el Staff de una academia bomberil, escribir y publicar. Eso es esencial. Las biografías de los instructores deben ser públicas. La misión es promover nuevas ideas, nuevos métodos, líderes modelos. Instructores que no escriben o publican ideas propias, solo son robots que repiten lo que le enseñaron un día sin mayor valor agregado. Eso y no solo los simuladores es lo que atrae y hace a un centro bomberil exitoso. Así cuando hablamos de Flashover, la mente nos lleva a los bomberos suecos y a pronunciar dos o tres nombres. Nadie pregunta si el centro académico es grande o que otras cosas podemos aprender ahí. Ideas son progreso, sin ideas e innovación estamos sin el mejor equipo de protección personal, el único que puede salvar nuestras vidas: Nuestra mente. Otro tema aparte es si los centros de formación impactan positivamente en la sociedad tanto como debieran. La ANB es la primera entidad que ha acomodado un curso de bomberos basado en la NFPA 1001 en América Latina. Sin embargo, mientras se pueda ser bombero en Chile sin pisar la ANB hay un sinsentido, aunque según me comentó el director de la Academia Nacional de Bomberos de Chile, don Guillermo Araya Huerta, debido a que la legislación ha sido modificada para favorecer la certificación de todo los bomberos chilenos eso podría cambiar. Es lo que digo, la pesada burocracia, los "peros" que pesadas estructuras organizacionales tienen para ser eficientes cuando son tan largas y deben coordinar tantos elementos. Aunque ahora parece ser mejor el terreno en Chile. Soy optimista. Estamos frente a un nuevo episodio bomberil en el continente. La competencia es buena, positiva. Será interesante como Chile reacciona ante el nuevo operador. Veremos si los argentinos construyen la mejor herramienta del continente y la aprovechan para convertirse en los líderes en formación o habrán "peros" para simplemente desaprovechar el capital invertido. También, seremos testigos del progreso de la joven inversión privada para formar bomberos y brigadas de emergencia en Perú.