Tuesday, April 28, 2009

Sistema de Comando de Incidencias


José Musse

Durante muchos años como bombero fui consciente del desorden que imperaba en los incidentes. Había aprendido algunos principios fundamentales para hacer las operaciones más efectivas, una que recuerdo bien venía de una graciosa diapositiva en inglés que decía “Estas invitado a la fiesta, no dejes de traer agua” y con ese comentario reforzaba el concepto de conectarse a hidrantes al arribar. Pero aquellos principios aunque hacían más suave la atención y respuesta, no eliminaban el problema de duplicar funciones, establecer una adecuada seguridad para los bomberos, llevando adelante tareas tan simples como conteo de hombres y tiempos en los SCBA. Ni mencionar la coordinación y puestos a establecerse, básicamente era inexistente y la realidad era que teníamos muchos jefes dando ordenes distintas y hasta contradictorias. Todo dependía en gran medida de los oficiales y su talento, no era un sistema establecido, era en base a trabajo de particulares. Unos lo hacían bien otros no tan bien.

Generalmente los servicios de emergencia traían caos donde ya había anarquía. Alan Brunacini fue para mi época y para muchas generaciones posteriores un iniciador, pero su literatura en inglés, la falta de redes como Internet hacia poco factible saber donde adquirirlas, traducirlas y emplearlas. El Firescope desarrollado en California era totalmente desconocido. Básicamente solo comencé a trabajar desarrollando mi propio Comando de Operaciones, hasta que un día, asistiendo a una conferencia de Certified Emergency Managers del FEMA descubrí lo que hacia pocos meses se estaba estableciendo en los Estados Unidos, el Sistema de Comando de Incidencias.

Eso marcó un antes y un después en mi carrera. Inmediatamente invertí en mi capacitación, en literatura y asistí a seminarios.

Cuando comencé a dictar clases en Perú para difundir el Sistema de Comando de Incidencias en español, no tuvo la acogida que esperaba en un principio, pero sabía de su potencial y fue así como inicie “Desastres.org” cuyo nombre original fue “Incident Commander Magazine” y solo usamos el domino “Desastres.org” por ser corto, genérico y servir para la revisión de catástrofes y su estudio. Existió “IC Magazine” con el propósito de resaltar la nueva tecnología. Brunacini usaba el termino FGC (Fireground Commander) en mi caso deseaba marcar esa transformación y realzar el nuevo titulo oficialmente reconocido, el de Incident Commander o Comandante del Incidente.

Entendiendo que el mundo sería redefinido por la Internet, comenzamos a ofrecer cursos on line sobre el Sistema de Comando de Incidencias desde 1997. Fuimos los primeros en el mundo de habla hispana. Me acuerdo que ni siquiera el Essentials Firefighting del IFSTA, tercera edición lo mencionaba y esa era una barrera para autenticar lo que decíamos, que el Sistema de Comando de Incidencias se impondría. Un día durante un workshop en el Hotel Holiday Inn en Lima, un bombero aeroportuario de Corpac que trabajaba en el Jorge Chávez me dijo amablemente que aunque lo encontraba interesante – el Sistema de Comando de Incidencias-, ellos no lo podrían aplicar, pues seguían las recomendaciones de la OACI. Le afirmé inmediatamente que esta era la tendencia, que pronto OACI y otros adaptarían sus documentos. Que estaba seguro que la Agencia Federal de Aviación ya lo había realizado en medida que el Sistema de Comando de Incidencias era de uso obligatorio en los Estados Unidos. De eso no pasó, de un debate, de un intercambio de ideas. Al año siguiente la cuarta edición del Essentials Firefighting del IFSTA, recogía el Sistema de Comando de Incidencias, más allá de eso, la bibliografía comenzó a ser abundante y la Internet comenzó a tener más peso en las comunicaciones globales.

Durante la Administración Clinton ocurrió la gran explosión; de 300 websites existentes a 3 millones de espacios virtuales. Abundante y pública información, donde los primeros respondedores no podían negar que la tendencia era el Sistema de Comando de Incidencias.

Latinoamérica tiene una innegable influencia norteamericana, la NFPA es casi adoptada sin cambios en los países de la región a diferencia de Europa que aunque recibe esa misma influencia puede invertir en su propia investigación y generar normas y estándares diferentes. Así que el Sistema de Comando de Incidencias comenzó a ser de interés masivo a finales de la década del 90 y la mejor solución en la región.

Sin embargo, enseñar el Sistema de Comando de Incidencias no es fácil y aplicarlo menos. Déjeme explicarle. No es que se necesite ser científico para entenderlo, ni mucho menos. Cuando digo enseñarlo, es realmente simple hacerlo. El desafío es hacerlo sin aburrir ni agotar a la audiencia. No olvidemos que el ICS está lleno de reglas, títulos, cargos, deberes y responsabilidades. Básicamente es solo eso lo que se debe aprender en clase.

Más de 12 años dictando talleres sobre el Sistema de Comando de Incidencias me ha enseñado agregar bastantes imágenes gráficas, para que los participantes acostumbrados a operaciones tradicionales contra incendio o responsables de rescate y servicios de emergencias médicas puedan visualizar físicamente los sectores y el organigrama.

La ubicación del Puesto Comando de Incidente -no olvidemos que muchos servicios de bomberos han trabajado en desorden- para ello hice varios Análisis de Incidentes que servían de estudios.

Conforme pasaron los años fui agregando en mi curso varios ejemplos prácticos, casos hipotéticos que explicaban ciertas particularidades, así como casos reales y fui integrando mejor las Tácticas en Combate de Incendios, el liderazgo y el Sistema de Comando de Incidencias. Otro problema es que se trata de un sistema y para ello funcione necesita que los otros elementos que intervienen tengan conocimiento de parte de la interfase que les corresponde, caso contrario no funciona. ¿Qué significa en la práctica? Que muchas organizaciones y no solo bomberos se involucran en la atención a emergencias y si estas desconocen el Sistema de Comando de Incidencias, pues no lo usarán. Así que he aprendido a ofrecer consejos y asesoría cuando desea establecerse el Sistema de Comando de Incidencias, dando algunas claves para vender la idea y fomentar la cooperación entre agencias gubernamentales. Usar simuladores virtuales le dio otra dimensión a la enseñanza del Sistema de Comando de Incidencias y es parte habitual del curso que dicto. Uno de los problemas comunes, es que falta disciplina en los que toman decisiones y muchas veces cuando
se simulan estos casos, los comandantes atolondran a sus bomberos con una serie de órdenes.

Uno de los simuladores que uso, ayuda a crear una mente clara en el Comandante del Incidente. El simulador asigna equipos y tareas. Una a una, mientras el Comandante del Incidente planea las acciones, el escenario es dinámico, cambia, los equipos reportan diferentes situaciones como válvulas de gas, bomberos lesionados o hallazgo de victimas. El que resulta tratando de sobrevivir a tal atolondramiento es el Comandante del Incidente y esa es la habilidad que intento desarrollar con varios ejercicios, clarificando estrategias para tomar decisiones y tener una mente entrenada que enfrente los eventos como jugando ping pong y sin parálisis. Con la computadora no hay negociación. Uno se somete a ciertas reglas y debe obedecerlas, exactamente como dicen la mayoría de SOP (Standard Operation Procedure) y el mismo

Sistema de Comando de Incidencias. Más allá de estas reglas, están otras leyes físicas con las que nos enfrentamos y son parte de nuestra cotidianeidad. Evolución del fuego, propagación, flashover, backdraft. Todo ello puede cargarse en el simulador y serán parte del taller que dictaré sobre Sistema de Comando de Incidencias en Maracay, Venezuela durante el I Congreso Nacional e Internacional de Actualización de los Servicios de Atención a Emergencias y Urgencias Médicas y Expo-Exhibición de Unidades de Emergencias del 23 al 27 de junio del 2009.

(*): Site del autor: http://www.josemusse.com/

E-mail: jmusse@desastres.org